Para los que están al día de la actualidad del cómic, y particularmente del cómic americano, poco habrá que contarles de The Walking Dead. Pero para aquellos que están más interesados en las series de televisión que en los tebeos, tal vez les sorprenda (o haya sorprendido) que la cadena AMC esté produciendo una serie, dirigida nada menos que por Frank Darabont, conocido por dirigir cosas tales como The Shawshank Redemption, The Green Mile o The Mist (las tres, adaptaciones de relatos o novelas de Stephen King, por cierto), relatando un holocausto zombi. Cabe recordar que la AMC es la responsable de Breaking Bad y Mad Men.
Será la segunda serie televisiva dedicada al tema zombi puesto que, salvo que alguien nos corrija, el único precedente es la británica Dead Set.
Sorprendentemente no circula mucha información por la red al respecto, más allá del blog oficial de la AMC. En español, diría que quién está más atento es el blog todoseries.com.
Sorprendentemente no circula mucha información por la red al respecto, más allá del blog oficial de la AMC. En español, diría que quién está más atento es el blog todoseries.com.
Así pues, resulta que lo que tiene pinta de ser una de las mejores y más rompedoras series de TV de nuevo cuño que se están preparando, está teniendo una repercusión más similar a la de un tapado (los anglos dirían sleeper). Es de suponer, no obstante, que según se acerque el estreno se despliegue una importante campaña de promoción.
Pero, ¿qué podemos esperar de la serie televisiva The Walking Dead? Por supuesto tendremos que darle un vistazo al cómic en el que se basa; para los datos objetivos remito al lector a la entrada correspondiente en la Wikipedia, para pasar directamente a un análisis más personal.
El cómic de Kirkman, Moore y Adlard basa su éxito y relevancia en varios factores, sin ser el menor de los ellos la popularidad, proliferación y variedad que han experimentado los últimos años las historias de zombis y/o infectados, las cuales no se han limitado al cine, siendo este medio tal vez el más conocido, sino que también han abundado en los videojuegos y el cómic. Sin ese conocimiento de base que se supone al lector, probablemente el impacto de esta colección hubiera sido menor. Bien es cierto, y es algo muy a destacar, que el cómic empezó su publicación (hasta ahora ininterrumpida, aún con cambio de editorial) allá en el 2003, así que difícilmente se le podrá acusar de oportunismo. A lo largo de los años todo parece haber favorecido a la historia y la temática, y así estamos donde estamos, con una adaptación a una pequeña pantalla que cada vez se hace más grande (y no me refiero al formato de los aparatos).
En cuanto a lo artístico, a lo largo de las 74 entregas hasta la fecha, Kirkman se ha dedicado a repasar multitud de permutaciones no solo de las historias de zombis, sino también de las historias de mundos postapocalipticos y del género de terror en general: grandes capitales repletas de muertos vivientes, el zombi lento, la horda zombi, las nuevas comunidades humanas, la búsqueda y lucha por los recursos de la desaparecida sociedad ("oséase", combustible, armas y conservas de comida), el canibalismo, la domesticación, el nomadismo, el contagio, la muerte paulatina de miembros del grupo... Y todo ello, además, desde una perspectiva cercana, con excelentes retratos de los personajes, creando una identificación o empatía inmediata por parte del lector. Otro recurso también casi definitorio de esta serie es el uso al extremo de la técnica del cliffhanger, hasta el punto que la primera viñeta de un episodio es la continuación inmediata de la última del anterior, con apenas unos segundos de separación en los sucesos que se narran. Se hace, además, con enorme maestría. Así, casi se podría decir que seguimos a los personajes sin interrupción a lo largo de toda la historia desde el número 1, con un uso muy comedido de la elipsis narrativa, y generalmente siempre con intenciones dramáticas, y un magistral uso del flash-back.
La colección se estructura en arcos narrativos, aunque solo nos percataremos de ello si echamos la vista atrás. Por supuesto hay determinados hitos en la historia, pero a menudo estos se producen justo en medio de un episodio, para que en la última página asistamos a un nuevo y angustioso cliffhanger, sin darnos la oportunidad de bajarnos del tren en la parada: con Kirkman el tren está siempre en marcha.
Al fin, retomando la pregunta del principio: ¿qué podemos esperar de la adaptación televisiva? Por lo pronto, si repasamos las imágenes y vídeos de promoción, así como las declaraciones de algunos implicados, parece que la serie cuenta con un presupuesto holgado, que se ha cuidado mucho el maquillaje de los zombis, y que el gore no va a faltar. En cuanto a la historia, y viendo los actores confirmados, podemos suponer que, poco más o menos, se va a seguir el desarrollo del cómic desde el primer número. Según IMDB hay 6 episodios previstos para la primera (esperemos que no última) temporada, pero se hace difícil saber cuánto de la historia se pretende abarcar. Frank Darabont ha declarado que no va a seguir la historia del cómic al pie de la letra, pero más allá de eso no podemos más que elucubrar. Si atendemos a sus adaptaciones anteriores (que cito al principio), acostumbra a ser bastante fiel al original. Habrá que esperar hasta Octubre para salir de dudas.
Aficionados al cómic, al cine de terror y fantástico, al gore, al cine de acción... y aficionados a las historias de zombis en particular, por supuesto; hay mucha gente que acogerá esta serie con los brazos abiertos. ¿Eres uno de ellos?
Pero, ¿qué podemos esperar de la serie televisiva The Walking Dead? Por supuesto tendremos que darle un vistazo al cómic en el que se basa; para los datos objetivos remito al lector a la entrada correspondiente en la Wikipedia, para pasar directamente a un análisis más personal.
El cómic de Kirkman, Moore y Adlard basa su éxito y relevancia en varios factores, sin ser el menor de los ellos la popularidad, proliferación y variedad que han experimentado los últimos años las historias de zombis y/o infectados, las cuales no se han limitado al cine, siendo este medio tal vez el más conocido, sino que también han abundado en los videojuegos y el cómic. Sin ese conocimiento de base que se supone al lector, probablemente el impacto de esta colección hubiera sido menor. Bien es cierto, y es algo muy a destacar, que el cómic empezó su publicación (hasta ahora ininterrumpida, aún con cambio de editorial) allá en el 2003, así que difícilmente se le podrá acusar de oportunismo. A lo largo de los años todo parece haber favorecido a la historia y la temática, y así estamos donde estamos, con una adaptación a una pequeña pantalla que cada vez se hace más grande (y no me refiero al formato de los aparatos).
En cuanto a lo artístico, a lo largo de las 74 entregas hasta la fecha, Kirkman se ha dedicado a repasar multitud de permutaciones no solo de las historias de zombis, sino también de las historias de mundos postapocalipticos y del género de terror en general: grandes capitales repletas de muertos vivientes, el zombi lento, la horda zombi, las nuevas comunidades humanas, la búsqueda y lucha por los recursos de la desaparecida sociedad ("oséase", combustible, armas y conservas de comida), el canibalismo, la domesticación, el nomadismo, el contagio, la muerte paulatina de miembros del grupo... Y todo ello, además, desde una perspectiva cercana, con excelentes retratos de los personajes, creando una identificación o empatía inmediata por parte del lector. Otro recurso también casi definitorio de esta serie es el uso al extremo de la técnica del cliffhanger, hasta el punto que la primera viñeta de un episodio es la continuación inmediata de la última del anterior, con apenas unos segundos de separación en los sucesos que se narran. Se hace, además, con enorme maestría. Así, casi se podría decir que seguimos a los personajes sin interrupción a lo largo de toda la historia desde el número 1, con un uso muy comedido de la elipsis narrativa, y generalmente siempre con intenciones dramáticas, y un magistral uso del flash-back.
La colección se estructura en arcos narrativos, aunque solo nos percataremos de ello si echamos la vista atrás. Por supuesto hay determinados hitos en la historia, pero a menudo estos se producen justo en medio de un episodio, para que en la última página asistamos a un nuevo y angustioso cliffhanger, sin darnos la oportunidad de bajarnos del tren en la parada: con Kirkman el tren está siempre en marcha.
Al fin, retomando la pregunta del principio: ¿qué podemos esperar de la adaptación televisiva? Por lo pronto, si repasamos las imágenes y vídeos de promoción, así como las declaraciones de algunos implicados, parece que la serie cuenta con un presupuesto holgado, que se ha cuidado mucho el maquillaje de los zombis, y que el gore no va a faltar. En cuanto a la historia, y viendo los actores confirmados, podemos suponer que, poco más o menos, se va a seguir el desarrollo del cómic desde el primer número. Según IMDB hay 6 episodios previstos para la primera (esperemos que no última) temporada, pero se hace difícil saber cuánto de la historia se pretende abarcar. Frank Darabont ha declarado que no va a seguir la historia del cómic al pie de la letra, pero más allá de eso no podemos más que elucubrar. Si atendemos a sus adaptaciones anteriores (que cito al principio), acostumbra a ser bastante fiel al original. Habrá que esperar hasta Octubre para salir de dudas.
Aficionados al cómic, al cine de terror y fantástico, al gore, al cine de acción... y aficionados a las historias de zombis en particular, por supuesto; hay mucha gente que acogerá esta serie con los brazos abiertos. ¿Eres uno de ellos?
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